No descubro nada nuevo si digo que todos estamos sobrecargados de trabajo, con múltiples servicios comunitarios, actividades, urgencias e imprevistos…Pero estoy convencida de que...
Desde mi experiencia, descubro que para mantener en tensión la urdimbre de la vida, es necesario un “silencio rescatador” de lo esencial del existir...
Me resultan muy elocuentes los telares de artesanía, donde millones de hilos se entrecruzan, hasta mostrarnos la “belleza coral” que brota de unas manos...