¡Qué bueno sería que cualquier comunidad trabajase alguno de los núcleos temáticos que aparecen en el documento preparatorio! ¿Cómo se realiza el discernimiento sobre las opciones de misión? ¿Cómo se ejerce la autoridad dentro de nuestra comunidad? ¿Con qué instrumentos promovemos la transparencia y la responsabilidad?
Fernando Cordero Morales ss.cc.,
Comisión de Comunicación del Sínodo
Me da mucha alegría expresar lo que ha sido el inicio del camino sinodal en Roma a mis hermanos y hermanas de la vida religiosa. Escribo como religioso y trato de transmitir algunas experiencias y reflexiones que, como miembro de la Comisión de Comunicación del Sínodo, he podido vivir del 9 al 12 de octubre pasados. Los dos primeros días fueron de apertura del proceso sinodal, jornada de reflexión y misa de inauguración. Durante el 10 y 11 de octubre se desarrolló el trabajo de cada una de las cuatro comisiones de la Secretaría del Sínodo: teología, metodología, espiritualidad y comunicación. Llevábamos meses en conexión a través de videoconferencias. Ahora es distinto con la presencialidad: descubrir la estatura de los otros y sus maneras de ser, en una composición universal. Destaco, además, la interrelación y tiempos para compartir entre unas y otras comisiones y los tiempos conjuntos.
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