Alejandro Moral, Prior General de los Agustinos «La compasión es lo único que nos hace creíbles»
Traemos a nuestra Mirada con Lupa un Superior General de nuestro tiempo. Alejandro Moral acaba de ser elegido por sus hermanos agustinos para guiar la orden los próximos seis años. Tiene un buen conocimiento de la universalidad de la presencia agustina en el mundo porque lleva doce años prestando diferentes servicios en la Curia General. Ahora le toca ser el rostro y la voz de esta palabra de vida profética que, sin duda, encarna la orden de san Agustín. En la entrevista nos habla de liderazgo, de diálogo con la cultura, de ensanchar las tiendas, de misión… todo bajo el paraguas profético de la compasión.
Asume el servicio de gobierno tras años intensos de conocimiento de la Orden. ¿En qué han cambiado las cosas?
En estos 12 años de vida en Roma, he visto y percibido grandes cambios, tanto a nivel de Iglesia, como a nivel de Orden…En la Iglesia he vivido la presencia de tres Papas: Juan Pablo II, Benedicto XVI y ahora el Papa Francisco. Lo he vivido muy de cerca, no sólo por estar en Roma sino porque durante los últimos 9 años he sido el Procurador de la Orden, es decir, el responsable de la Orden para las relaciones con la Santa Sede. En el interior de la Iglesia se está dando un cambio importante y rápido. Ha habido un puente entre el Papa Juan Pablo II y el actual Papa Francisco. Este puente lo ha constituido una persona humilde e inteligente, un hombre contemplativo: Benedicto XVI. Hemos tenido tres grandes Papas, en los últimos tiempos. Ellos han ido guiando a la Iglesia en su servicio al Evangelio y han hecho que la Iglesia no se detuviera.
En la Orden de san Agustín también hemos realizado grandes cambios, muchos de ellos marcados por el rumbo del mundo actual. Por ejemplo, en nuestros últimos capítulos generales la presencia de africanos y asiáticos ha sido cada vez más numerosa. Menos europeos y americanos. La edad media de los capitulares ha sido bastante menor que en los anteriores capítulos. Se ha dejado escuchar mucho más la voz de los jóvenes. Desde hace tiempo vivimos menos encerrados en la propia mentalidad y más abiertos a las diversas culturas. Hablamos mucho más de “fraternidad” y de “colaboración” que de “obediencia”, y si se trata de mandar se dice que “sólo se puede mandar desde el amor”, creando una fraternidad y teniendo autoridad desde la confianza que se despierta en los hermanos. Hay deseos de una fuerte interioridad. Antes se hablaba más de “compañerismo”. Hoy preocupa más “tener entrañas compasivas” que “juzgar al hermano”.
Es muy agustiniano el diálogo con la cultura… ¿Hasta qué punto la formación es un aspecto crucial para la vida religiosa de este tiempo?
Lo es. En realidad, siempre ha sido un tema crucial. Hay que tener religiosos maduros, que hayan crecido en la reflexión y responsabilidad personal desde el encuentro con Dios. San Agustín y la Orden de san Agustín, su historia y tradición, es la de tener personas bien formadas, tanto a nivel psicológico como intelectual. Leer y estudiar, llevan a la reflexión y a la contemplación; provocan silencio interior y dan paz. El estudio ayuda a abrir caminos de diálogo, a comprender al hermano, sea de la confesión o de la religión que sea. Cuanto más se estudia, uno entiende que es más ignorante, y dispone su interior para el encuentro con el “otro”, sea de la cultura, confesión, religión o partido político que sea. Una buena formación crea personas maduras y abiertas para el encuentro. Nos ayuda a estar en continua búsqueda.
¿Debería la vida religiosa impulsar un proceso de reestructuración eclesial. Es decir, ayudar a equilibrar las fuerzas evangelizadoras, complementación de carismas…?
Este es uno de los puntos claves. Seguramente nos ayudaría a todos a ser más evangélicos, es decir, a vivir más el Evangelio y anunciar mejor a Jesucristo. Nos centraríamos más en lo esencial y, al mismo tiempo, profundizaríamos más en lo que nos enseñan otros carismas, en otros puntos claves del Evangelio. Es difícil pero no significaría perder identidad sino ganar en profundidad y vida, en creatividad. (Entrevista completa en VR Octubre de 2013)
