“Mayor felicidad es dar que recibir” (Hech 20,35)
Enrique Gervilla Castillo
Catedrático Emérito CC. de la Educación. U. Granada
En nuestra sociedad, en la que el bienestar material y el hedonismo son valores prioritarios para muchos ciudadanos, los voluntarios, los misioneros, quienes trabajan en comedores sociales, y otras muchas personas pertenecientes a las múltiples ONGs… dan un ejemplo de lucha contracorriente, digna de resaltar y de elogiar. Muchos ciudadanos movidos por su altruismo o por su fe cristiana, dedican parte de su vida, y de modo gratuito, a colaborar con la cultura, la naturaleza, los niños y ancianos, el medio ambiente, la educación, la ayuda a los más necesitados, etc. Y ¿cuál es su recompensa? Solo el gozo, la alegría y la satisfacción interior de hacer el bien.
El valor de la gratuidad
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