El domingo, día 6, la jornada se celebró en la ciudad de Medellín. La respuesta fue realmente buena. El Salón de Actos Santa Dotea se quedó pequeña. 400 religiosas y religiosos abarrotaron el local. La experiencia de la jornada, unida a las vividas los días previos en Colombia, han supuesto para la Revista un buen aliento. Hay una constatación clara: buena parte de la vida religiosa de habla hispana vive y bebe de los contenidos que nuestra publicación regularmantre ofrece.
La sesión de Medellín contó con las intervenciones de Cristo Rey y Gonzalo Díez. Ambos hicieron sus propuestas obre misión y comunidad para este tiempo, encontrando un eco muy notable de los presentes.
La VR necesita centrar sus esfuerzos para este tiempo en la clarificación de la adhesión a la misión y, para ello, el primer paso es reforzar, cuidar y adecuar la comunidad. Ésta debe ser un lugar pedagógico y terapéutico que toda persona que abraza la misión debe tener. La jornada de VidaReligiosa de Medellín concluyó con la celebración de la Eucaristía en la que se hizo palpable la vinculación con la tierra y el pueblo al que se sirve.