miércoles, 24 abril, 2024

No juzgar, sí salvar

No es sencillo dejar el juicio de lado y mucho menos dejarse salvar.

Lo que nos sale con más facilidad suele ser la condena y más en estos tiempos en los que las personas nos encontramos cansados y tensos.

Pero la propuesta de Dios va por otro camino, el de salvar. El de arrimarse al árbol malo para convertirlo en Madero de salvación.

En buscar lo que está perdido o enfermo o excluido para reintegrarlo en el aprisco de la compañía de los otros. Ya no hay soledades impenetrables o abismos insondables si nos dejamos encontrar por el que se hace el encontradizo a cada instante.

Mucho más sencillo y claro y justo y nuestro es el juicio (más bien la condena). Pero nuestro Dios no deja de ser complicadamente sencillo salvando a quien busca dejarse salvar, aunque sea a tientas. Casi siempre a tientas.

Dejarse. Amén

Print Friendly, PDF & Email
- Advertisment -

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

DEBERÍAS LEER

Memoria y eucaristía

0
Así oramos hoy: “Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia”. Si me preguntas cuál es el motivo de nuestra oración,...

VIENTO DE LIBERTAD

Síguenos en Twitter