Contestando a Mlf

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Hola, no sé si este blog es para esto u otras cosas, pero la pregunta qué haces tiene enjundia y es complicada… Hay miles de libros escritos que tratan el tema (Teodicea o escatología o cristología…) Grandes tratados que aclaran las ideas y ayudan mucho.

Pero en este caso, no sé (como en otros tantos casos). Me imagino que un niño pequeño se puede llegar a agobiar mucho con la realidad de la muerte (también nos agobiamos los no tan pequeños). Mi sobrina, de 6 años, cree (y es muy bonito) que su bisabuela y su tía Merche están viviendo en una estrella, en el cielo cerca o al lado de Dios, y que desde allí nos miran y nos cuidan.

Lo importante es creer (no sé si saber) que hay alguien que nos cuida más allá de ese paso. Y que los que viven de ese modo nuevo también nos acompañan y nos regalan su ternura (ahora maximizada hasta el extremo por el Amor que todo lo puede en la debilidad).

Dios no es un cortafuegos o un gran milagro andante. Por eso las preguntas sobre la muerte, los desastres naturales, los sin sentidos que nos parecen o son injustos no tienen una respuesta de intervención directa divina (así no funciona, aunque nos lo quieran hacer creer). Dios es debilidad absoluta que está al lado de los que ya no pueden, curando las heridas con el aceite de la ternura y el amor sin límites, aquí y después de la muerte, como en un continuo.

Yo, al niño, se lo dibujaría, como hacía Antoine de Saint-Exupéry con su Principito. Quizás una estrella valga, ya habrá tiempo de explicarlo con otras palabras más adelante.

Y para ti te dejo un texto de Tertuliano, un cristiano del s. III, para que te ayude a dibujar:

Esta carne que Dios formó con sus manos a su imagen, que le dio vida con el soplo de su aliento, que estableció para que habitara en toda su creación, disfrutando, y le encargó que se revistiese de sus misterios y de sus enseñanzas, amando la pureza, experimentando en sí misma los sufrimientos… ¿Esta carne no resucitará, después de haber sido creada de este modo por Dios? Atrás, atrás, el pensamiento de que Dios puede abandonar a una destrucción eterna la obra de sus manos, el objeto de los cuidados de su inteligencia, el receptor de su aliento, la reina de su creación, el heredero de su liberalidad, el sacerdote de su religión, el soldado que lo testimonia, la hermana de su Cristo. Sabemos que Dios es muy bueno, aprendemos de su Cristo que Él es el único que es tan bueno. Es Cristo quien nos exige el amor al prójimo, haciendo él mismo lo que manda: amando la carne que es su prójimo por tantas razones.

 

Pues eso… Perdona la longitud del texto…

1 COMENTARIO

  1. Hola gracias por la rápidez. Necesitaba algo más que la estrella para un niño que ya sabe del Sistema solar y otros. Tertuliano me regaló una perspectiva más que hasta ahora no habia pensado y se la di en sencillo, y para la estrella me sirvió la nueva sensación de contento que le sorprende este año cuando hace los deberes sin enfadarse «mamá estoy contento, ¿tu estás contenta» le dije que siempre nos sentiria a su lado alegrandonos con el y queriendole etc…
    Un saludo y gracias

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