Un Hermano marista y uno de La Salle llegan al Líbano para ayudar niños refugiados
Una nueva comunidad intercongregacional comienza el Proyecto Fratelli
(Champagnat.fms.it) Un Hermano marista y un Hermano De La Salle han llegado al Líbano para iniciar un proyecto con el fin de educar a niños refugiados y sacarlos de las calles.
El Hermano Miquel Cubeles, un Hermano marista de la provincia L’Hermitage de Barcelona, ha llegado a Beirut para lanzar el ‘Proyecto Fratelli’ junto al Hermano Andrés Porras Gutiérrez, un Hermano De La Salle de México.
La nueva comunidad, la cual será formada inicialmente solo de los dos Hermanos, será una de las pocas comunidades inter-congregacionales que tienen los maristas en el mundo.
“Yo siento la fuerza de Jesús en mí y pienso que este es mi primer apoyo”, indicó el H. Miquel a la oficina de prensa de la casa general. “Un segundo apoyo es el que me irá dando también el hecho de trabajar juntos – no soy yo quien va, es el Instituto Marista, es la Iglesia, los demás hermanos con quien viviremos juntos.
El H. Miquel señaló que “deberíamos recibir el máximo apoyo de los demás, saber ser una comunidad, una fraternidad y hermanos de los demás”.
El español, quien ha etiquetado el proyecto como “una apuesta realmente valiente del Instituto Marista”, viajó a Beirut el 1 de septiembre, dos días después del H. Andrés.
Los Hermanos esperan planear su trabajo más detalladamente en los próximos días y meses, una vez que sepan dónde están más necesitados.
El H. Andrés subrayó que “no llegamos con un proyecto claro, llegamos para escuchar, conocer la realidad, a ver lo que podemos hacer y con la gente de allí asesorarnos”.
“Si vamos a comenzar un proyecto pues que sea con los más necesitados”, afirmó el mejicano. “No queremos replicar algo que ya existe o ir con niños o jóvenes que ya son atendidos sino con los que son más desahuciados, más vulnerables o que no tienen ningún punto de apoyo, ningún familiar”.
Según el H. Miquel, “inicialmente estaremos en unos barrios de Beirut y residiremos en una comunidad religiosa, la nuestra, y posteriormente nos instalaremos allí donde veamos que la necesidad es más acuciante”.
“Ojalá – y esto lo digo con todo corazón – sepamos ir allí donde realmente nadie va”, agregó el H. Miquel. “Donde haya un niño solo, sin referentes, pueda encontrar a un Hermano”.
Su trabajo será conocido como el ‘Proyecto Fratelli’, una inspiración por parte de la Carta Apostólica del Papa Francisco a las personas consagradas en noviembre que resultó en que se pusieran de acuerdo los Hermanos Maristas y los Hermanos de las Escuelas Cristianas para lanzar este proyecto.
Yo recibo esta invitación como un regalo”, reiteró el H. Miquel, quien vivía hasta ahora en Barcelona, España. “Es una nueva oportunidad para reforzar y para proyectar con más valor mi vida de Hermano en este nuevo comienzo”.
Indicó que fue una “gran sorpresa” cuando el superior general, el Hermano Emili Turú, le pidió que encabezara este trabajo en el Líbano.
“Pensaba que no era para mí porque lo veía como un reto demasiado difícil por la situación del país, por la edad que ya tengo y también pues porque estaba haciendo una misión en Barcelona que creo que también es de frontera, es útil y en la que me siento muy bien”, observó el H. Miquel.
“El Proyecto Fratelli es un reto para mí, me estimula para potenciar y vivir con más profundidad mi vocación y responder hoy a esta necesidad concreta”, continuó diciendo.
En cuanto al encuentro con el H. Andrés dijo “nos hemos conocido, hemos sintonizado, y creo que haremos un buen equipo”.
“Pero evidentemente no trabajaremos solos, ni queremos vivir solos”, reiteró. “Queremos formar una comunidad con cuantos más posible, colaborar con y asociarnos a otras muchas personas, contar también con nuestros hermanos y laicos presentes allá y juntos intuir y soñar proyectos reales y dar atención a estos niños y jóvenes”.
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El Proyecto Fratelli es una colaboración intercongregacional entre los Hermanos Maristas y los Hermanos De La Salle, con invitación a otras congregaciones. El Proyecto Fratelli no se limita a la actuación en Oriente Medio y se espera que podrá establecerse en otros lugares donde los niños y los jóvenes sufren a causa de los conflictos, son desplazados, refugiados o migrantes.
Los coordinadores en el Líbano, los hermanos Andrés Porras, FSC y Miquel Cubeles, FMS, trabajarán con un Comité consultivo local y formarán a los jóvenes refugiados para que inviertan en ellos mismos y para el futuro de sus países de origen.
